El camino se ha abierto, sin prejuicios, hacia el instinto melódico más templado en lo que ha pasado por las venas de Pueblo Nuevo hasta la fecha. Sin duda este trabajo de Francisco Pinto se ajusta a un ahora urgente de canciones inmediatas en el tratamiento sónico y en lo formal de las letras, cuando las hay. En Boo Boo se presentan efectivas melodías de fácil recordación, una ventaja desde la óptica Pop, a la vez que un delicado trabajo de texturas sintéticas y de guitarras que son, a estas alturas de su producción, sello particular de la calidad y calidez de su música. En el siglo XX, durante la cultura de difusión radial de la música, se hablaba de ‘singles’. Bien, aquí hay hartos donde escoger.»